Cómo eliminar la ansiedad social: consejos para lograrlo

Si analizamos nuestra vida y las situaciones que hemos experimentado, en algún momento seguro hemos sentido un poco de ansiedad ante cierto grupo de personas. Reconocerlo es el primer paso para aprender cómo eliminar la ansiedad social, un problema mucho más común de lo que podría parecer.

De hecho, algunas personas lo padecen sin ni siquiera ser conscientes de ello. Si alguna vez has experimentado temblores, sudoración repentina y nerviosismo en general, es porque has sufrido un ataque de ansiedad social.

Aprende cómo eliminar la ansiedad social

Imagínate que naturalmente pudieras ejercer una presencia seductora sobre las personas, que consiguieras su atención y las mismas apreciaran tus opiniones. Que logres además que la gente disfrute a menudo de tu compañía y deseen pasar el mayor tiempo contigo compartiendo ideas y sueños. ¿Todo suena genial, cierto? Se trata de sólo algunos de los cambios que podrías obtener si aprendes cómo eliminar la ansiedad social.

Tienes que tener muy claro que eliminar la ansiedad social requiere perseverancia y dedicación, por lo cual no puedes esperar obtener resultados de la noche a la mañana. Sin embargo, con el esfuerzo adecuado, será sólo cuestión de tiempo para que te sientas cómodo en situaciones donde muchas personas estarían repletas de nervios.

Si sigues las siguientes indicaciones, podrás ponerle fin a tu problema de ansiedad social.

Usar la vulnerabilidad como un mérito

Si te encuentras nervioso y se nota con claridad tu vulnerabilidad, esto no es algo negativo. Al contrario, es algo positivo porque le caerás de mejor manera a las personas si aprendes cómo jugar tus cartas.

Si no escondes tus debilidades y más bien las expones, esto te mostrará como una persona autentica, porque demostrarás que tu confianza en ti mismo no depende de las apariencias.

Por ejemplo, si cuando hablas con una persona que te atrae experimentas un alto nivel de nerviosismo, obtendrás mejores resultados si abiertamente le dices que te pone nervioso. Este efecto psicológico ocurrirá debido a que sólo una persona muy segura de sí misma es capaz de aceptarse incluso con esta clase de vulnerabilidades.

Por otra parte, cuando hagas esto te quitarás un peso muy grande de tus hombros, ya que hacer esto te ayudará a sentirte mejor contigo mismo, lo que contribuirá a eliminar los nervios y hacerte sentir más a gusto.

Actuar con naturalidad

Existe muchos tipos de carisma diferentes. Algunas personas tienen más facilidad para usar un estilo extrovertido, mientras que otras son introvertidas, pero sin que esto entorpezca sus relaciones sociales.

Cuando eres una persona de pocas palabras, lo ideal es que entrenes tu dialecto de forma que cada vez que hables logres impactar a las personas. Cualidades como la asertividad influyen mucho en este aspecto, porque si este carisma se te da mejor, deberías considerar entrenar tu asertividad.

Ahora bien, si notas que te resulta más natural expresarte con abundancia, debes enfocarte en hacer que tu dialéctica no resulte pesada y te conviertas en alguien que naturalmente sea «el alma de la fiesta». Una de las mejores formas de lograr esto es entrenando tus habilidades humorísticas, ya que si haces reír a las personas, la gente disfrutará al oírte hablar.

Reemplazar las muletillas con silencio

Las muletillas son un error comunicativo que muchas ocurre debido a la ansiedad social. La mejor forma de evitarlas es enfocarte en sustituirlas paulatinamente por silencio. Debes tener en cuenta que con el silencio también comunicas.

Si eres capaz de dejar de hacer un breve silencio para pensar lo que tienes que decir te sentirás más tranquilo, con lo cual reducirás tu problema de ansiedad social a la vez que denotarás en el inconsciente de las personas que tienes tanta confianza en ti mismo que eres capaz de hacer pausas al hablar sin miedo a que dejen de escucharte.

Realiza actividad física

Entre los múltiples beneficios del ejercicio físico se encuentra el que puede ayudar a reducir la ansiedad en sus diferentes formas. Esto se debe a que la actividad física libera hormonas en tu cerebro que te ayudarán a sentirte más cómodo contigo mismo y que a su vez ayudan a normalizar la actividad del sistema nervioso.

Tómate la vida con humor

Muchas personas tienen la tendencia de tomarse pequeños problemas de o comentarios de manera personal. Si eres capaz de manejarlos con humor, no sólo les quitarás peso (y en consecuencia evitarás que te produzcan ansiedad), sino que también lograrás mostrarte como una persona más magnética.

Recuerda por qué quieres mejorarte a ti mismo

Sin una buena motivación corres el riesgo de estancarte en el camino. Tal y como mencioné al principio, dejar atrás la ansiedad social no es un proceso que se da de la noche a la mañana, sino que requiere mucho esfuerzo y dedicación.

Pensar ocasionalmente en los beneficios que obtendrá tu vida cuando dejes atrás este inconveniente que detiene tu desarrollo social, puede ser más que suficiente para mantener motivado, incluso cuando los resultados parezcan tardar mucho en aparecer.

Referencias

• Sierra, J. C., Ortega, V., & Zubeidat, I. (2003). Ansiedad, angustia y estrés: tres conceptos a diferenciar. Revista mal-estar e subjetividade, 3(1), 10-59.
• Frangella, L., & Lukaszewicz, C. (2003). Manual psicoeducativo para personas con ansiedad social. Fundación foro, 10 (2) 1, 6.
• Olivo, E. M. (2011). La ansiedad social en el ámbito universitario. Revista Griot, 4(1), 35-48.